Mas ¡ay Señora!, que yo me veo oprimido por mis vicios, y cargado con mis culpas y pecados, y no puedo levantarme sin los poderosos auxilios de la divina gracia, y sin el cortesía de vuestro cuidadoso socorro. “Les daré cuanto me pidan, con tal de que no se oponga https://walti406fwm1.angelinsblog.com/profile